Uno de los principales problemas que puedes encontrar cuando vas a cambiar el cartucho de tinta a tu impresora es que no lo reconozca. Esta operación y este problema suele ser muy frecuente, pero todavía lo es más cuando hemos adquirido un modelo compatible, es decir aquellos que no son originales, teniendo muchas más ventajas, como por ejemplo una carga de tinta superior o un coste más reducido, pudiendo en algunos casos comprar dos cartuchos por el precio que te saldría uno original. Sin embargo, en ocasiones puede fallar y aquí te vamos a buscar todas las soluciones útiles para que sepas qué hacer si la impresora no reconoce el cartucho compatible.
Problemas habituales con el cartucho compatible en la impresora
Cuando vamos a comprar un cartucho y vemos que no funciona, puede que nos llevemos las manos a la cabeza, pensando que hemos hecho una mala compra y que era preferible optar por los originales de la marca que por esos de marca blanca o compatibles. Para esto, comprueba que has realizado bien los siguientes pasos que suelen ser los principales problemas por los que la impresora no ha reconocido el cartucho de tinta.
Cartucho no encajado correctamente
Una de las acciones que debemos de comprobar en caso de que no se haya reconocido el cartucho compatible es comprobar que ha encajado como es debido. Por lo general, cuando conectamos un cartucho en su lugar, deberemos de escuchar un clic que es el que nos anuncia que se ha conectado correctamente el producto, sin embargo en otros esta circunstancia no es tal, debiendo de comprobarlo uno mismo. Para esto lo que tendremos que hacer es sacar de nuevo el cartucho y encajarlo para que de esta manera pueda hacer conexión como es debido. Por otro lado, nos recomiendan A4Toner, expertos en cartuchos compatibles que revises que el sello de plástico esté retirado, ya que este objeto lo que consigue es que el chip esté protegido y al quitarlo, para colocarlo en su posición, se consigue que las órdenes de la impresora vayan al cartucho liberando en el momento preciso la cantidad necesaria de tinta para la realización de la impresión.
Chip del cartucho dañado
El chip del cartucho puede estar dañado, pero no porque se trate de un modelo compatible, sino porque haya salido de fábrica de esta manera o incluso porque con la manipulación antes de colocarlo dentro de la impresora se ha llevado un golpe o se ha arañado con una de las partes internas del producto. Esto puede ocurrirle tanto a un modelo compatible como a uno original, por lo que no quiere decir que se trate de algo que únicamente le vaya a ocurrir a estos productos. En el caso de que el chip esté dañado o incluso sucio, lo que deberemos de hacer es tomar un poco de algodón y una pizca de alcohol para humedecerlo, consiguiendo de esta manera que toda la suciedad pueda quedar libre y le sea más fácil a la impresora reconocer el cartucho. En el caso de que veamos que el chip está algo despegado o incluso cuenta con alguna doblez, nuestra recomendación es que intentemos hacer algo de presión para colocarlo en su posición original.
Cartucho en mal estado
Por supuesto, también tenemos que contar con que el cartucho que tengamos ante nosotros esté en mal estado por cualquier motivo. No es algo muy habitual ya que por lo general los cartuchos tanto compatibles como originales son comprobados y tienen una larga duración, pero quizás un lote ha salido en mal estado y te ha tocado a ti uno de estos productos. Si has realizado las comprobaciones anteriores, lo mejor es ponerte en contacto con la tienda de tinta donde lo has adquirido y comentarle tu problema.
Solucionar el problema del reconocimiento de los cartuchos compatibles
En ocasiones, el problema de la compatibilidad o reconocimiento del cartucho no viene causado por este, sino que más bien se considera problema de la impresora, pudiendo ocurrir incluso que es bastante antigua y que no funciona como debería. Si has comprobado con los pasos anteriores que la tinta está en buen estado y que todas sus piezas están correctamente colocadas deberás de realizar unos pasos en tu impresora. En primer lugar lo que tienes que hacer es apagar la impresora y desconectarla tanto del ordenador como de la fuente de electricidad por lo menos media hora. Una vez que lo has hecho, tendrás que conectarla de nuevo e instalar el cartucho de tinta compatible. Por lo general, este paso lo que consigue es que la memoria de la impresora se reinicie y pueda operar con más rapidez, reconociendo en un menor tiempo la tinta que se le ha instalado.