La decoración oriental es una de las más bonitas, modernas y sofisticadas que podemos encontrar en el mercado. Las distintas culturas, así como la geografía del país, sus costumbres y hábitos dan lugar a un tipo de muebles muy diferentes a los que estamos habituados en la zona de occidente. El estilo oriental combina estupendamente en la decoración de cualquier hogar. Esta se basa, sobre todo, en la armonía y el equilibrio, siendo muy características las líneas rectas y los detalles simples.
Los colores, también suelen variar, siendo los más comunes el blanco y el negro. Y es que cuando hablamos de decoración oriental, debemos tener en cuenta que esta se refiere, sobre todo, al estilo japonés, chino o zen. La decoración de este tipo persigue el orden. Busca una distribución en la cual predominen los espacios amplios, pero también bien iluminados, evitando sobrecargar las estancias con el fin de mejorar la relajación. Destaca, así mismo, la importancia de los elementos de la naturaleza. Como, por ejemplo, la utilización de la madera, objetos místicos y amuletos, la importancia del papel tapizado, la presencia del agua y las flores, el cristal o las piedras. Todos ellos bien medidos para que la ornamentación no sobrecargue en exceso la estancia —buscando siempre los detalles simples—.
A continuación, analizamos cuáles son los principales muebles que podemos utilizar para conseguir una decoración ambiental en nuestra vivienda. Sigue leyendo este artículo para más información.
Los tatamis y el futón japonés
Los tatamis forman parte de cualquier dormitorio japonés. Estos consisten en una estera que se coloca sobre la superficie para aislar el frío y para colocar el colchón encima de él. Hay que tener en cuenta que en el país nipón se utiliza un tipo de colchón diferente. Este es conocido como futón. El mismo consiste en una funda con relleno —por lo general con relleno de paja de arroz prensado— que resulta muy aislante, muy manejable y puede ser plegado cada vez que deja de ser utilizado para economizar el espacio. Tanto el tatami como el futón japonés son elementos muy característicos de esta región del continente asiático.
En la actualidad se comercializan bases o somieres para tatamis y futones que complementan la totalidad de la cama japonesa. Estas bases elevan mínimamente la altura del tatami sobre el suelo, tan solo a unos pocos centímetros, así como el futón. Por lo general, estas camas japonesas suelen estar hechas de distintos materiales, como la madera de haya —es común encontrar varios tipos de madera de tonalidad clara—. Una de las características más destacadas de las camas japonesas, en las cuales se incluyen estas bases de madera, así como del tatami y el futón, es que están hechas con materiales 100% naturales, como pueden verse en el catálogo de Haiku-Futon.com, empresa especializada en la comercialización de muebles de descanso de estilo oriental.
Armario de puertas correderas
Como explicábamos, las características de la decoración oriental destacan por su simpleza y sencillez. Además, no suele ser empleado una gran cantidad de mobiliario. El armario oriental debe tener puertas correderas. Estas ayudarán a economizar el espacio ya que no resultarán molestos a la hora de abrirse ni podrán chocar con ningún otro objeto o mueble. La variedad de armarios, es tan amplia como puedes imaginar, aunque —en el caso de los armarios japoneses— todos suelen tener las mismas características. Es decir, con puertas correderas. Un diseño muy común es el armario con puertas blancas divididas en rejillas rectangulares de madera en color negro. Así mismo, los podemos encontrar empotrados o independientes, también creando pequeñas habitaciones. Por supuesto, estos están disponibles en otros diseños, aunque por lo general, lo que más suele variar son los colores.
El biombo
Es otro de los muebles más utilizados en las culturas orientales. El biombo consiste en un mueble formado por dos o más láminas verticales —por lo general hechas de tela o de madera—. Estas láminas son articulables, lo cual permite extenderlas o plegarlas cuando no están siendo utilizadas. Las mismas son empleadas para establecer una separación dentro de otro espacio. Debes tener en cuenta que la cultura oriental persigue la mayor amplitud, así como evitar el mobiliario innecesario, por ello, el biombo resulta tan útil. Con él se puede crear una distinción de espacio en el momento de cambiarse dentro del dormitorio, así como en otras estancias de la vivienda.
Ahora bien, su uso desde sus orígenes ha cambiado considerablemente. En la antigüedad este mueble era empleado como pantalla de protección contra el viento —tal como viene a significar su nombre—, evitando que el viento soplara dentro de dichas habitaciones.
Mesita para el té
Como sabrás, en países como en China, Japón, Taiwán o Vietnam existe una muy fuerte tradición conocida como la ceremonia del té sobre la cual existe una gran cantidad de investigaciones e, incluso, se ofertan cursos y estudios relacionados con ella. La ceremonia del té es un ritual con un riguroso protocolo influenciado por el budismo zen en el cual está implicada la preparación de esta bebida, así como su presentación. Esta ceremonia busca conseguir la mayor economía de movimientos posibles. Al tratarse de una cultura tan arraigada y extendida en base al té —concretamente el té verde matcha—, resulta imprescindible contar con una mesita para el té si lo que se quiere es adoptar un mobiliario oriental tradicional en la vivienda. Por lo general, estas mesas son de reducida estatura y suelen acompañarse con cojines o sillas orientales para practicar las ceremonias.
Ahora bien, será conveniente contar con algunos de los siguientes elementos que forman parte del ritual, como el chawan —o cuenco donde se prepara el té—, el natsume —o recipiente donde se almacena el té—, el chasen —o batidor de bambú utilizado para mezclar el té con el agua—, el chasaku —o cucharita de bambú—, el hisaku —o cucharón que se utiliza para servir el agua— o el chakin —o pañuelo blanco de lino que se emplea para limpiar el chawan—.