El manejo de desperdicios en el hogar puede convertirse en un inconveniente, principalmente lo referente a la basura orgánica. Para hacer un buen uso de estos residuos, se hace necesario separarlos en bolsas o contenedores separados y posteriormente llevarlos a otros donde serán procesados.
Una buena alternativa para procesar los desperdicios orgánicos en casa, es instalar un triturador de alimentos en el fregadero. Estos electrodomésticos se acoplan al drenaje y se colocan directamente los residuos a fin de que sean procesados.
Los trituradores de alimentos para fregaderos aún no se utilizan ampliamente en los hogares, aunque están ganando espacio por su practicidad. Los mismos contribuyen a que mantengas tu cocina mucho más limpia y son de fácil funcionamiento.
¿Cómo funcionan los trituradores de alimentos para fregaderos?
Los trituradores de alimentos son equipos que permiten procesar los desperdicios orgánicos que se producen en el hogar. El mismo consiste en una carcasa que se acopla al drenaje del fregadero, una cámara de trituración y un motor que hace funcionar el mecanismo.
Los desperdicios caen en el depósito y posteriormente un anillo que se mueve a alta velocidad, se encarga de triturarlos y volverlos pedazos muy pequeños. Este material es descartado directamente a las tuberías de aguas grises de la vivienda.
Estos electrodomésticos vienen de diferentes tamaños y al elegirlos hay que tomar en cuenta que el diámetro de la boca de entrada se adapte al desagüe de tu fregadero. Por esto, lo mejor es adquirirlos en conjunto y una de las mejores opciones es Fregaderosencimera.com, donde encontrarás una gran diversidad de modelos que se ajustan a cualquier estilo de cocina.
Otro aspecto que debes considerar es la potencia del motor que hace funcionar al triturador, que debe ser de al menos 300 W. Asimismo, toma en cuenta que estos equipos pueden ser algo ruidosos aunque se han desarrollado algunos modelos más silenciosos con motores de tecnología inverter.
Tipos de trituradoras de alimentos para fregaderos
Es posible conseguir trituradores de alimentos para uso doméstico o para hostelería, entre los que la principal diferencia es el tamaño y la potencia. Un triturador doméstico suele pesar entre 3 hasta 20 kg, mientras que uno industrial llega a superar los 100 kg.
En cuanto a la potencia, los equipos para hostelería deben contar con al menos 1000 W para procesar adecuadamente el volumen de desperdicios. Los trituradores de alimentos para fregaderos domésticos suelen presentar una potencia entre los 300 hasta 500 W.
Los trituradores domésticos se clasifican en dos tipos con base a la forma de encendido:
1. Alimentación continúa: suelen ser los más utilizados debido a su facilidad de uso, ya que solo se debe accionar un botón sobre la encimera para encenderlos. Estos trituradores son de boca abierta y al caer los residuos en la cámara de trituración, se van procesando mientras el motor se encuentra encendido.
2. Lotes: en este caso, se requiere colocar una tapa de forma manual en la boca del triturador a fin de que comience a funcionar. Tiene la ventaja de que solo se acciona una vez que han caído los desperdicios ya seleccionados, ayudando a evitar accidentes debido al deslizado un cubierto o materiales plásticos que se deben retirar del triturador. Suelen ser más costosos y menos comunes que los de alimentación continúa.
Las 3 mejores marcas de trituradoras de alimentos para fregaderos
Los primeros trituradores de alimentos fueron diseñados en 1927 por el arquitecto estadounidense John Hammes. Posteriormente, se llegaron a comercializar y diversas compañías dedicadas a la fabricación de electrodomésticos, se han dedicado a su producción.
InSinkErator
No se puede hablar de los trituradores de alimentos sin hablar de esta marca estadounidense fundada en 1938 por John Hammes, el inventor de estos electrodomésticos. En la actualidad pertenece a la corporación Emerson y se especializa en producir dispensadores de agua y sus reconocidos trituradores.
La marca cuenta con varias líneas, siendo la más completa la Evolution 200, que es ultra silenciosa y con la cámara de trituración de acero inoxidable. Este procesador no funciona con cuchillas, hace la trituración en tres etapas e incluye una canastilla que filtra los trozos más grandes.
Bort Global
Esta es una compañía internacional fundada en 1996 y con presencia en Alemania, China y Letonia, con sede en Riga la capital de este último. Se dedican a fabricar distintas herramientas eléctricas así como accesorios para coches, dispositivos de limpieza y pequeños electrodomésticos.
Entre estos, tienen una amplia gama de trituradores para fregaderos que van desde volúmenes pequeños a otros que se adaptan a familias de ocho personas. Algunos de sus modelos cuentan con botón de encendido inalámbrico y se pueden adaptar también al lavavajillas.
Teka
Es una empresa alemana que fue fundada en 1924 y desde entonces se ha enfocado en la fabricación de electrodomésticos para la cocina. Desde distintos tipos de lavavajillas, hornos y fregaderos que se complementan con sus trituradores de alimentos.
Los trituradores de Teka cuentan con una cámara de trituración de acero inoxidable, con una capacidad de 980 ml. En general, son de tamaño compacto, hacen la trituración en una etapa y se instalan con facilidad.
¿Compensa tener un triturador de comida para fregaderos?
Cuando vas a equipar tu cocina, la inversión en electrodomésticos es importante y se debe evaluar la utilidad de todos estos equipos. Los trituradores de comida no son muy utilizados, pero tienen una gran utilidad al hacer que tengas un ambiente mucho más higiénico.
Los residuos orgánicos en casa representan entre un 20 a 25% de los desperdicios, por lo que su reciclaje puede ser complejo. Al utilizar estos equipos se hace más sencillo su procesamiento y se evitan atascos en las tuberías, que pueden ocurrir por descuidos al irse desperdicios de gran tamaño.
Igualmente, se considera que facilitan el procesamiento de las aguas servidas en las plantas de tratamiento. Otra las grandes ventajas que señalan sus usuarios es que se eliminan los malos olores que se generan por la descomposición de los residuos orgánicos.
Por otra parte, son de fácil instalación, su mantenimiento es sencillo y cada vez se fabrican más silenciosos y con mayor eficiencia. Sin embargo, algunos especialistas consideran que aumentan el nivel de nitrógeno en el agua, lo cual puede afectar la calidad de la misma debido a la proliferación de algas en las plantas de tratamiento.